Como un aporte al desarrollo sustentable y en línea con el proceso de descentralización que se lleva a cabo en el país, Fundación Chile en conjunto con la Comisión Nacional de la Productividad, elaboró una serie de recomendaciones adaptadas a las competencias de los nuevos gobiernos regionales para impulsar la construcción sustentable desde los propios territorios.

Las medidas propuestas fueron presentadas durante un encuentro virtual que contó con la participación de los gobernadores regionales Patricio Vallespín (Los Lagos), y Jorge Flies (Magallanes y Antártica Chilena); Rodrigo Krell, Secretario Ejecutivo de la CNP; Hernán Araneda, Gerente de Desarrollo Humano de Fundación Chile (FCh); Guillermo González, Jefe de la Unidad de Economía Circular del Ministerio del Medio Ambiente; Vladimir Glasinovic, Gerente de Prospección y Nuevos Negocios de Fundación Chile, y representantes de los gobiernos regionales de todo el país.

“Desde las regiones queremos impulsar el desarrollo regional sustentable y eso pasa porque todos los sectores productivos hagan el esfuerzo que deben hacer, y en eso no está exento de compromiso y de desafíos el sector de la construcción, por lo que la construcción sustentable es un escenario que podemos y debemos desarrollar y con el apoyo de actores como Fundación Chile es algo que podemos lograr”, señaló durante el encuentro el Gobernador Regional de Los Lagos.

Las medidas recomendadas fueron elaboradas a partir de tres informes generados por Fundación Chile para la Comisión Nacional de Productividad, en el contexto del proyecto de Productividad del sector de la Construcción realizado durante el año 2020, agrupados en 5 ejes temáticos:

Rodrigo Krell, Secretario Ejecutivo de la CNP, se refirió a algunos de los desafíos en materia de sustentabilidad. Detalló que no existe un trade-off entre sostenibilidad y productividad, “por el contrario, el estudio encuentra que empresas que incorporan formas de operar sostenibles son, en promedio, más eficientes que aquellas que no.

Según el benchmark nacional, las obras que generaron un volumen de escombros bajo el promedio fueron un 8% más productivas que sus pares. Y también existen en ellas una menor tasa de accidentes por cada 100 trabajadores (3,7 v/s 5,5), presumiblemente por un mayor orden y una gestión más limpia en sitio, lo que reduce los riesgos para los trabajadores. Adicionalmente, viviendas de una mayor eficiencia energética, que han sido construidas con material que busca reducir las emisiones en la etapa de uso, se muestra como más costo-eficiente en comparación a la construcción actual”, precisó.

Agregó, además, que Chile es el país OCDE con menor nivel de productividad respecto del uso de los recursos, y el sector construcción genera alrededor de 6,8 millones de toneladas anuales de residuos, siendo el 70% residuos áridos. Lo anterior, detalló es relevante tanto para el proceso constructivo, como para la operación de las obras, por cuanto el sector construcción representó el 31% del uso de energía en el país, y usualmente el 72% de las emisiones de CO2 se asocia a la etapa de operación.

Por otra parte, valoró la realización de este taller, “ya que es una manera de entregar de manera concreta herramientas para que las regiones puedan implementar ciertas recomendaciones en materia de sustentabilidad”, indicó.

Si bien la figura de los nuevos gobernadores regionales aún presenta cierta incertidumbre en cuanto a sus competencias y ámbitos de acción, se logró identificar medidas para las se encuentran facultados para comenzar a implementar en un trabajo que les permita avanzar en materia de construcción sustentable desde sus territorios.

En este sentido, Vladimir Glasinovic señaló que “el Estado tiene un rol en esta materia, hoy los gobiernos regionales pueden introducir exigencias de construcción sustentable a las licitaciones públicas, como incorporar ciertas normas como un incentivo para obtener mejores evaluaciones en los procesos licitatorios”.

Agregó que otra de las recomendaciones que apuntan en este mismo sentido es “aumentar la participación de los gobiernos regionales en la formulación, aplicación y modificaciones de los planes de descontaminación atmosférica, para lo cual se sugiere que soliciten la transferencia de competencias al gobierno central”. “Hoy día los gobiernos regionales no tienen competencias explícitas en los planes de descontaminación ambiental pero creemos que poder participar en los comités y subcomités operativos podría jugar un rol importante porque en los planes de descontaminación atmosférica se pueden incorporar una serie de requerimientos y condiciones específicas a los territorios en línea con una mejor construcción sustentable”, explicó.

Impulsar la calificación energética de viviendas para obras existentes (incluyendo las usadas) y avanzar en la generación de una red de recicladores de base del sector de la construcción fueron otras de las recomendaciones presentadas, siendo calificadas como prioritarias por los asistentes al encuentro, generando alto interés por parte de los representantes de los gobiernos regionales que visualizaron en estas medidas una oportunidad para desarrollar medidas concretas para mitigar el impacto medioambiental que genera este sector.

El Gobernador Regional de Magallanes y la Antártica Chilena, coincidió en que “hay un interés genuino y muy importante en lo que es el cuidado del territorio y la crisis climática, varios de los gobiernos regionales ya hemos declarado situación de crisis climática en el territorio y creemos firmemente que el esfuerzo se debe hacer de manera pública y privada en cada uno de los territorios”. “El rol que pueden cumplir las fundaciones como Fundación Chile y el Consejo Nacional de Productividad en ir acompañando este proceso de manera teórica, con datos y poder ir tomando decisiones políticas en base a la evidencia es fundamental”, concluyó.

A partir de estas recomendaciones, Fundación Chile busca impulsar la transformación de Chile hacia el desarrollo sostenible en un trabajo colaborativo con los nuevos gobiernos regionales.


Recomendaciones

1. Introducir exigencias de construcción sustentable en las licitaciones públicas.

2. Aumentar la participación de los gobiernos regionales en la formulación, aplicación y modificaciones de los planes de descontaminación atmosférica.

3. Masificar el uso de certificaciones de construcción sustentable.

4. Impulsar la calificación energética de viviendas (CEV) para obras existentes.

5. Impulsar la reglamentación térmica de edificaciones no residenciales.

6. Promover la formación de capital humano calificado en construcción sustentable.

7. Convocar a los actores regionales para celebrar un Acuerdo de Producción Limpia en el sector de la Construcción.

8. Promover la eficiencia energética en la gestión del Programa de Protección al Patrimonio Familiar (PPPF).

9. Promover la entrega de información respecto de la gestión y manejo de los residuos de la construcción.

10. Avanzar en la generación de una red de recicladores de base del sector de la construcción.

11. Localizar en el Plan Regional de Ordenamiento Territorial los centros de valorización de residuos de construcción y demolición y residuos voluminosos.

12. Articular a los actores pertinentes para la correcta supervigilancia de la ley Nº20.879 que sanciona el transporte de desechos a vertederos clandestinos.