Introducción

Hace 20 años, Fundación Chile se embarcó en una ardua tarea, desarrollar la industria del salmón en Chile, proyecto al que se unieron algunos visionarios que aprendieron todo sobre el negocio. Estos esfuerzos no demoraron en entregarles jugosos dividendos, hecho apoyado además por la creación del cluster del salmón, que agrupa a más de 200 empresas de todos los ámbitos que se desarrollan en torno a la salmonicultura.

El mayor porcentaje de las exportaciones chilenas de salmón corresponde a congelados, constituyendo aproximadamente el 70% de la producción. El 30% restante es el salmón fresco refrigerado en slice (filetes), aunque poco a poco las empresas están enfocando sus esfuerzos hacia productos con mayor valor agregado, como hamburguesas, salchichas, salmón seco, ahumado, trozado, entre otras variedades.

Luego que el pescado es faenado y procesado, el salmón se transporta a las plantas de procesamiento y empaque. Al ser un producto altamente perecible y del tipo de elaboración del producto, dependerá el envasado, además del mercado hacia dónde se exporte. En este sentido, el salmón fresco se empaca en cajas de poliestireno expandido con algún refrigerante como hielo o gel-pack, mientras que el salmón congelado va en cajas de cartón corrugado.

Un elemento sumamente importante en esta etapa son las exigencias de sanidad y seguridad, por lo que cada envase debe regirse por las regulaciones fitosanitarias en el origen y las correspondientes a cada país de destino, como documentos generales de exportación (Packing List, Factura ProForma, Guía de Despacho, el Certificado Sanitario) o bien, otras particulares según el destino (estar inscrito en la FDA en el caso de Estados Unidos, los certificados de origen EURO y ausencia de Malaquita verde para Europa, o el Certificado Análisis libre de Oxitetraciclina para Japón).

Una vez realizadas las labores de packaging, el salmón se coloca sobre pallets para comenzar su proceso de transporte y comercialización al exterior.

La cadena de frío

La cadena de frío es un elemento que debe ser altamente eficiente en el caso de un producto fresco como el salmón, con el fin de asegurar la mantención de su calidad a lo largo de la cadena logística.

En este sentido, las empresas embarcadoras de perecibles tienen una ardua tarea 7x24, la que requiere de personal competente en origen y destino, además de exigir grandes esfuerzos tecnológicos y logísticos, debido a que los principales mercados compradores están separados de Chile por grandes distancias. En este sentido, actualmente el principal producto chileno exportado a través del Aeropuerto Arturo Merino Benítez lo constituye el salmón.

El transporte desde las plantas productoras hasta la capital se realiza con camiones refrigerados, al igual que los productos frescos exportados hacia Brasil o Argentina. En el caso de los productos congelados, la principal vía de transporte es la marítima, realizada en contenedores refrigerados, regulados a -18ºC/-25ºC, lo que permite realizar un viaje de 12 ó 45 días, manteniendo las condiciones originales en el pescado. Asimismo sistemas de control satelital y sensores ubicados dentro de la cámara y la ayuda de dispositivos que permiten una rápida lectura en destino, como termógrafos portátiles o compatibles con equipos manuales (PDA), que garantizan que no se rompa la cadena de frío.

El paletizado

Este importante paso, previo a la estiba del avión para su despacho y realizado en el aeropuerto, consiste básicamente en ordenar la carga en los pallets o contenedores, para luego colocarles las mallas, pesarla y almacenar los equipos en las cámaras de mantención a una temperatura de 0º C, en espera de ser subida al avión. Toda esta cadena o proceso logístico se repite, casi de la misma manera y en sentido inverso, cuando el producto llega a destino.

El Operador Logístico

El operador tiene la importante tarea de coordinar todo lo relacionado con el proceso logístico de abastecimiento del salmón, como el transporte, distribución, almacenaje, control de stock, picking, inventarios, etc.

Además, tiene la labor de emitir los documentos y certificados, se preocupa del conocimiento de embarque o guía aérea, control de peso, lectura y procesamiento de datos de la carga utilizando sistemas de radiofrecuencia, entre otras actividades. Siempre debe buscar el mejor factor de ocupación o rendimiento de un avión, combinando el peso de la carga con el volumen, es decir maximizar la capacidad de los equipos de transporte aéreo (contenedores y/o pallets), los que varían según su tipo, con capacidades entre los 600 y los 3.500 kg.

En síntesis, el operador logístico tiene por función maximizar los parámetros de ruta, tiempo de tránsito, seguridad, cadena de frío y costo.

Una de las claves para alcanzar un funcionamiento óptimo en este sentido, es incorporar soluciones de almacenaje que posean la tecnología necesaria para permitir una rotación de productos fluída, además de que cumplan todas las normas sísmicas y estructurales.

Mindugar, con 35 años liderando el mercado del almacenaje industrial, introdujo las primeras estanterías para pallet en la industria acuícola a principios de los ‘80 y, desde esa época, ha continuado instalando sistemas de almacenaje que cumplen cabalmente con las exigencias de esta industria y su mercado, con una alta penetración del producto y crecimiento, que va a la par con esta pujante área económica (sólo la industria del salmón llegó a representar un 40% de las ventas totales de la compañía).

En este sentido, Rodrigo Castro, Representante Comercial de Mindu-gar para la X Región, señala que "prácticamente obligadas por los requerimientos de los países de destino de sus exportaciones, todas las empresas salmoneras mejoran constantemente sus instalaciones. Hace 20 años tenían en sus bodegas frigoríficas arrumados los pallets y dejaban de vender porque el producto no estaba a la mano. Actualmente, la tendencia es ubicar los pallets de forma tal que la consulta sea expedita y en primeras filas para su despacho, lo que se denomina FIFO y por eso nuestros sistemas han ido mejorando constantemente en la operativa de warehousing". En efecto, en un principio este tema estaba dominado por el bodegaje en estanterías Stock Racks, lo que ha evolucionado integrando mejoras en los sistemas de estiba y almacenaje.

El sistema Drive In fue el paso siguiente en este desarrollo. Entre los beneficios que los salmoneros encontraron en él, Rodrigo Castro destaca que "permite un almacenaje compacto, dejando sólo un pasillo, lo que produce una alta rentabilidad del espacio, en cerca de un 80%, y energética".

El almacenaje de tipo Push Back, en tanto, presenta características muy similares al Drive In, pero incorpora una mayor capacidad en el manejo de referencias distintas, además de no requerir de equipos especiales para el movimiento de productos, lo que redunda en una mayor facilidad en tareas de control, gracias a un carro telescópico que permite almacenar varios pallets en profundidad y mayor cantidad de tipos de productos en distintos nichos frontales, lo que representa un gran avance para esta industria, ya que hay diversas variedades de salmones.

"Hoy, la tecnología del almacenaje se dirige hacia la automatización y Mindugar lidera el mercado ofreciendo hoy sistemas de Racks Móviles y Carros Satélites, los que son robo-tizados, ya que por medio de un carro controlado a distancia dejan los pallets en posiciones alejadas, lo que mejorará aun más los sistemas de almacenaje, tanto en los procesos de la carga como los despachos", concluye Castro.