Los envases son eficientes en la medida en que se logra integrar forma y material a los procesos de las líneas automatizadas de envasado. En este ámbito, las líneas de envasado para envases flexibles ofrecen alternativas de llenado vertical y horizontal, que se relacionan a su vez con el tipo de sellado del pack.
Por una parte, se busca reducir costos e incrementar la eficiencia de las líneas de llenado. Pero ello no puede mermar la calidad del envase, cuyos objetivos son la conservación del producto, su higiene, así como facilitar la manipulación por medio de aperturas y cierres seguros, ofrecer mayor visibilidad y ganar espacio valioso en la cadena de distribución.
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| Esta solución de llenado vertical integra un fuelle lateral para un mejor soporte con fondo plano, a la vez que la cara frontal mejora su presentación. |
Los envases flexibles ofrecen diversas alternativas de forma final, en la medida que su diseño se integra a sistemas de llenado y sellado verticales y horizontales. Cada vez más, se buscan soluciones formales que optimicen la cadena de distribución, particularmente vinculadas a la exhibición en el punto de venta, aprovechando de mejor manera el ordenamiento de los productos para ganar valiosos centímetros. Esto se logra consiguiendo formas auto-soportantes, es decir, que ofrezcan superficies de apoyo en la góndola o elementos para colgarlos adecuadamente a los soportes disponibles o en conjunto con otros displays. Esta tendencia responde a las características del material, que tiende a ser resbaloso, dificultando su exhibición, como a la evolución de la bolsa tradicional.
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| Las tendencias en envases flexibles buscan optimizar su soporte en góndola y exhibición, así como reducir el impacto en la cadena de distribución. |
En este sentido, es interesante observar cómo las terminaciones y sellado de algunos formatos de envases flexibles pueden aportar para ganar espacio valioso, aprovechando a la vez las ventajas de barrera, sellabilidad y rendimiento, entre otras, de esta solución que juega un rol importante en el envasado de productos farmacéuticos, higiene personal, médicos, alimenticios y bebidas.
Evidentemente, no existe una máquina de llenado y sellado para todas las variedades de productos a envasar, por lo cual la selección de un equipo adecuado dependerá de la composición y tipo de partículas del producto, de su viscosidad, temperatura y tamaño.
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| Flow pack, envase de llenado rápido. Foto: Ulma Packaging. |
Otro de los factores a tomar en cuenta para decidir el formato del envase flexible es la funcionalidad que ofrecerá al usuario en su manipulación. Por cierto, ésta es una de las condiciones que mayor influencia ejerce hoy sobre los cambios de formatos y, en este sentido, los envases flexibles buscan integrar cierres, válvulas y que sean auto-soportantes, sea con fuelles o una base.
El flow pack
El flow pack es un proceso de llenado que debe su nombre al proceso de empaque del producto: la máquina crea un tubo a partir de una lámina flexible, y el producto lo atraviesa hasta alcanzar una mordaza que delimita el principio y el final del paquete, sellando ambos extremos, en general, con un corte característico y un sello longitudinal en todo su ancho.
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| La terminación tipo Flat End, con un sellado plano en los lados, consolida las galletas lo suficientemente para estructurar el cilindro sin romper el producto, y permite ahorrar espacio entre envases al embalarlos y exhibirlos en góndola. |
El concepto de funcionamiento del envasado tipo flow pack es bastante simple y efectivo y en él se debe regular la velocidad de avance del film, ya que, por regla general, cuanto más rápido avance, más largo es el paquete que se obtiene.
Este proceso implica un ajuste del diseño gráfico a las especificaciones anteriores, puesto que debe asegurarse que éste quede centrado en torno al producto, evitando desplazamientos acumulativos en el avance del film, lo que alteraría la imagen. Esto se logra, además, incorporando una fotocélula que lee unas marcas negras presentes en el impreso, para determinar el principio y el final del área donde se aplicarán los sellos laterales, manteniendo un ancho homogéneo. Se emplea tanto para el rubro alimentos (galletas, pasteles, panadería, barras, frutas y verduras, otros), así como para productos industriales, de oficina, cosméticos y cuidado personal, artículos del hogar, etc. Permite generar porciones o packs individuales, los cuales se pueden agrupar a su vez integrados a una bolsa o estuche de cartulina de mayor resistencia, pudiendo ser un empaque individual como parte de un sistema de envasado mayor.
