Un gran desafío fue lograr una vivienda que a pesar de sus metros cuadrados fuera de fácil mantención y de bajo consumo energético. Por esto se consideraron varios aspectos de sustentabilidad y ahorro de energía como matrices principales de la vivienda.

Año: 2011 – 2012.

Ubicación: Maitencillo, V Región, Chile.

Arquitectos: RAAR arquitectos.

Arquitecto a cargo: Bárbara Rivera Sáez.

Arquitectos asociados: Andrés Alvear Salinas y Emilio Fernández.

Construcción: Constructora Norte Sur Ltda.

Superficie construida: 550 m²

Superficie terreno: 3.372 m²

Contacto: barbara@raar.cl, www.raar.cl


Privilegiando la iluminación natural

Su posición en el terreno busca resguardarse del frío del sur y abrirse lo más posible a la orientación norte. Su forma de “L” permite que todos los recintos enfrenten el mar y genera un gran jardín central cobijado de los fuertes vientos.

Además, se logra que todos los recintos reciban el máximo de orientación norte, dejando los servicios y pasillos hacia el sur, a modo de buffer que protege del frío al resto de los recintos.

La iluminación natural fue tema principal de esta vivienda. Grandes lucarnas recorren la casa permitiendo que la luz penetre hasta el atardecer y así evitar el exceso de energía artificial.
Todos los artefactos instalados, ya sean para iluminación o sanitarios, contemplan sistemas con ahorro energético. La iluminación es principalmente en base a focos LED y fluorescentes.


Una obra sustentable

Las cubiertas soportan por un lado el sistema de agua caliente sanitario que se diseñó en base a paneles solares como apoyo al sistema convencional, y por otro a un jardín verde que aísla la cubierta sur de las bajas temperaturas propias de dicha orientación.

Esta cubierta verde, así como el resto del paisajismo, se compone principalmente de suculentas y cactáceas, vegetación propia del lugar que no requiere mantención.

Un huerto acompaña a la zona del quincho, permitiendo que la familia se autoabastezca de verduras en ciertas épocas del año.