Bárbara Fernández.
“Me interesa que la gente disfrute los espacios que habita, amo ser parte de proyectos vibrantes, intensos y desafiantes”, dice Bárbara. La diseñadora se entrega al máximo en cada desafío y por eso su cartera de proyectos de interiorismo siempre contempla encargos derivados de recomendaciones de clientes que quedaron felices con su trabajo.
Tendencias
En cuanto a las tendencias actuales en decoración e interiorismo, la diseñadora cree que hoy lo que prima es lo natural, enfocado en traer la naturaleza hacia los espacios interiores; las maderas, los linos, las piedras y los tejidos naturales. Sin embargo, su apuesta personal es hacia una mayor conciencia del entorno privilegiando la necesidad de conectarse con lo esencial.
Bárbara privilegia en sus proyectos los colores neutros, los blancos, grises y arenas. Fotos gentileza de Jaime Palma.
“Tener tiempo al aire libre debe dejar de ser un lujo, hoy más gente está interesándose por el outdoor y la vida sana, esto nos obliga a reencontrarnos con lo esencial, lo que se verá reflejado en espacios interiores más minimalistas, sustentables, ecológicos e inteligentes, que nos permitan disminuir nuestra huella de carbono”, afirma.
Dicha actitud se complementa a la perfección con su fascinación por los espacios multifuncionales, para ella los mejores espacios son aquellos que tienen la capacidad de transformarse según la necesidad del momento. “Me apasiona que los muebles se plieguen, se guarden, aparezcan y desaparezcan y que las camas se escondan, que las mesas se transformen en cuadros”, señala.
Menos es más
Desde pequeña habitó lanchas y casas rodantes, lo que despertó su entusiasmo por maximizar los espacios. “He hecho proyectos donde los muros se deslizan para dar espacio a diferentes mobiliarios y programas que se despliegan según el curso del día, para aprovechar al máximo el área disponible”, comenta.
La profesional señala que en Brasil, Estados Unidos y Japón, los micro departamentos son furor. “Es una lástima que en Chile sigamos creciendo horizontalmente, quitándonos espacios verdes y oxígeno”, enfatiza. Agrega que al chileno le cuesta entender que al vivir en menos metros cuadrados también puede tener un micro departamento, editando la manera de vivir y habitando solo con lo que realmente usa.
Siguiendo esta línea minimalista privilegia en sus proyectos los colores neutros, los blancos, grises, arenas. Colores suaves que ayudan a maximizar los espacios, espejos, maderas, linos y cobre, sin perder nunca de vista el lugar, entorno y la actividad que se va realizar en ese espacio.
La diseñadora cree que hoy prima es lo natural; las maderas, los linos, las piedras y los tejidos naturales. Foto Gentileza Cristóbal Correa.
100 % actitud
La oferta de decoración es cada vez más amplia y accesible en Chile, con tiendas de diseño y decoración para todos los bolsillos y muchos diseñadores nacionales ejerciendo sus carreras, así que hoy todo se reduce a la audacia y el entusiasmo del cliente. Para Bárbara la actitud del cliente “lo es todo”. En sus palabras allí radica el alma del proyecto, lo que la mueve y le da la energía para poner toda su creatividad en lo que hace. “Se me ocurrió transformarle a un cliente un piano vertical en desuso en un bar, su confianza absoluta e ilusión por el resultado son lo que me hace pasar horas restaurando con mis propias manos cada dibujo y detalle del mueble original”, señala.
Baños del Hotel NOI BLEND de Santa Cruz. Foto Gentileza Cristóbal Correa.
Bárbara comenta, también, que se encuentra iniciando con un cliente la restauración de una casa rodante de lujo y que solo ver su sonrisa, como se ilumina cada vez que van proyectando el trabajo, es lo que le da sentido a su trabajo.
“Me gustan los proyectos grandes”
El año pasado, Bárbara recibió la propuesta de decorar el hasta entonces Hotel Blend Santa Cruz en Colchagua. Un hotel muy especial, proyectado en lo que fuera una antigua bodega de vinos de 1875, donde las labores de rescate patrimonial fueron intensas, ya que el desafío era mantener las cualidades del adobe en cuanto a aislación térmica generando un importante ahorro en el consumo energético y logrando que las habitaciones fueran frescas en el verano y temperadas en el invierno.
Una de las características de la decoración y la construcción del hotel fue el rescate y el reciclaje, sin perder de vista que los espacios nuevos debían preservar su historia, incorporando por ejemplo un quincho que llegó directamente desde una casa de Aculeo, tablas de muros que eran parte del techo con colores y vetas, así como baños llenos de detalles donde los vanitorios hacen alusión a las lecherías.
Tener tiempo al aire libre debe dejar de ser un lujo, hoy más gente está interesándose por el outdoor y la vida sana. Foto Gentileza Cristóbal Correa.
A Bárbara le gustan los proyectos grandes, donde pueda conectar a otros, así que eligió a 13 diseñadores, la mayoría de la Asociación de Decoradores, para enfrentar junto a ellos el desafío. Los requisitos eran crear dormitorios con ciertas pautas de materiales y colores basados en el Feng Shui, ajustándose a un presupuesto y logrando dormitorios con un estilo simple y elegante, donde los huéspedes se recargaran energéticamente.
Sobre el proyecto, la diseñadora señala que era tan entretenido y mágico el lugar que cada profesional se hizo cargo, con mucho entusiasmo, de una habitación, poniéndole cada uno toda su energía. “Logramos hacer un trabajo en equipo increíble, en pocos meses se convirtió en NOI BLEND Santa Cruz y hoy allí se respira un ambiente único”, concluye.
