Hernán de Solminihac.

A su juicio, ¿cómo está Chile en materia de infraestructura pública y privada?
Chile ha tenido un desarrollo importante en su infraestructura en los últimos 20 años. Gracias a la alianza públicoprivada, se ejecutaron las grandes obras que se requerían con urgencia, pero esto generó una dificultad respecto de lograr los incrementos adicionales para nuevas inversiones. Por esta razón, hoy estamos en un momento en que tenemos que ser creativos para poder resolver cuáles son los desafíos más importantes de la infraestructura del futuro y hacer un esfuerzo en determinar qué proyectos representan el salto que el país requiere, con una mirada de Estado a largo plazo.

Actores plantean que nos hemos quedado atrás en este tema. ¿Cuál es su opinión al respecto?
Diría más bien que estamos con un crecimiento más lento que las expectativas. Lo importante es pensar bien cuáles son los proyectos que se requieren, desarrollarlos completamente para que puedan ser materializados y resolver todos los requerimientos ambientales y de las comunidades de forma armónica. Con el propósito de tener proyectos que realmente se puedan construir y que den seguridad a todos los involucrados.

Carreteras, gentileza Copsa.

Hay que entender que no se debe pensar en construir solo por construir; se tienen que focalizar los esfuerzos en los servicios que entregará una determinada infraestructura para los distintos usuarios, tales como: peatones, bicicletas, autos, camiones, trenes, aviones, por ejemplo, que son los que utilizan las distintas obras.

¿De qué manera es posible reactivar proyectos que están “estancados”?
En este caso, no estamos frente a un problema de recursos o de política, sino más bien de tener efectivamente proyectos bien definidos y atractivos no sólo desde el punto de vista constructivo, sino que también respecto de los beneficios que esa infraestructura presta a los usuarios. Ese es el foco. Tenemos que pasar del concepto de construir infraestructura al concepto del servicio que la infraestructura va a prestar a futuro, porque esto último es lo que visualizan los usuarios. Es un complemento muy importante y creo que el trabajo entre el sector público y privado es fundamental para lograrlo, tanto en la creación de proyectos como en la materialización y operación de ellos.

¿Dónde están las mayores necesidades en infraestructura pública?
Hay que seguir trabajando en las redes de comunicación. Hay lugares que hoy tienen poca accesibilidad y otros que están quedando reducidos respecto a las nuevas necesidades que impone el crecimiento de la población. Por otra parte, también hay que trabajar en un eficiente transporte público, especialmente en sectores más congestionados, complementando la capacidad de las vías con rutas alternativas. Complementando lo anterior, se tiene que avanzar hacia las redes viales resilientes, que nos permitan enfrentar mejor los fenómenos de la naturaleza.

Hospital Felix Bulnes, gentileza Astaldi Chile.

Otro foco en el cual hay que trabajar es el agua. Hoy enfrentamos un cambio climático que está afectando la vida de las personas. Hay que anticiparse y una forma de hacerlo, es crear las distintas infraestructuras que ayuden a regular este fenómeno, tales como: embalses, sistemas de infiltraciones, sistemas que permitan regular los sistemas de agua potable, y protecciones a los deslizamientos de masas. Adicionalmente, está la infraestructura más productiva que tiene que ver con puertos y aeropuertos, y sus accesos.

En el caso específico de los puertos, no solo hablamos de los grandes, sino que también de los pequeños y medianos, que ayudan a algunas regiones o ciudades con un movimiento importante de productos y servicios.

La infraestructura hospitalaria es otra necesidad, donde la alianza públicoprivada es una variable que debemos retomar. Algo similar ocurre en el caso de las cárceles. Hoy existe un esfuerzo por crecer en la capacidad de recintos penitenciarios y en que estos tengan un cuidado adecuado para su objetivo final, que es la reinserción de quienes están privados de libertad.

Viaducto Chamiza, gentileza Vialidad MOP.

¿Cree que el modelo de concesiones representó un salto en la forma de hacer las cosas?
La relación público-privada a través de las concesiones es un modelo que aportó y debe seguir aportando al país y que funciona fantástico para la mayoría de los casos. Pero también creo que las concesionarias deben tener en mente que no es una obra la que se está construyendo, sino que el servicio que este proyecto ofrece a los usuarios. Es importante que el país avance en esta dimensión, que seamos mucho más visionarios de cuál es el objetivo que se está satisfaciendo con esa infraestructura, que veamos más a largo plazo, que nos anticipemos a las necesidades y seamos creativos en las soluciones.

¿En qué nivel se encuentra Chile en infraestructura vial?
Si uno mira los rankings internacionales, Chile ha subido en infraestructura vial. Con recursos económicos y con toda la capacidad técnica que ponen los privados, se logra hacer un salto mucho más rápido para implementar las necesidades que el país requiere, que hacerlo sólo con el esfuerzo público. Eso fue lo que sucedió, pasamos de tener carreteras bastante tradicionales y básicas, a tener vías interurbanas de estándar internacional. Algunas de las cuales ya están alcanzando sus demandas de diseño en algunas zonas, por lo que es necesario hacer mejoras en capacidad, servicio, tecnologias y mecanismos de cobro.

Puente Chacao, gentileza Vialidad MOP.

¿Cómo estamos en relación al proyecto del Puente Chacao?
El Puente Chacao es vital para Chile. Se trata de una gran obra, no sólo para el desarrollo económico de Chiloé, sino que también de todo el país, porque va a tener un movimiento importante y generará una gran atracción turística. ¿En qué estamos hoy? En que el proceso de licitación que se utilizó requiere que la empresa ganadora tiene que diseñar el proyecto completo y después iniciar la fase de construcción. De acuerdo a las bases, no se puede empezar la construcción antes que esté aprobado el proyecto. Además, es importannte recordar que tuvimos sismos y terremotos, posteriores a la licitación, que cambiaron las condiciones base del proyecto. Tengo entendido que estamos cerca de que se apruebe el diseño definitivo y asi pueda iniciarse pronto la construcción.